El orgasmo es el período de mayor excitación en una relación o acto sexual. Aunque sólo dura unos segundos, cada persona lo siente de forma diferente.
El orgasmo puede alcanzarse tanto en hombres como en mujeres, provocando sensaciones diferentes en cada uno. En las mujeres esta sensación es más intensa que en los hombres, las mujeres en su pico de excitación suelen tener la vagina más lubricada, incluso algunas expulsan esta cantidad de líquido, lo que erróneamente se conoce como eyaculación femenina, pero todas sabemos que este fenómeno no es posible. porque sólo los hombres son capaces de tal fenómeno.
En los hombres este periodo es más corto, alcanzando su punto máximo apenas unos segundos, con la liberación de semen, tras este periodo se produce lo que llamamos agotamiento, quedando el pene fláccido tras la eyaculación.
Existe otra práctica sexual muy inusual originaria de la India y conocida como yoga tántrico, que defiende la idea de que el semen es una esencia divina y, por tanto, no debe ser expulsado por el hombre en todas las relaciones sexuales.
Por tanto, aprenden a llegar al orgasmo y a no eyacular inmediatamente después, aumentando la fuerza vital del hombre. Al lograr este objetivo, también podrán alcanzar los llamados orgasmos múltiples, al igual que las mujeres.
Los efectos beneficiosos de las relaciones sexuales son numerosos, tales como: mejor circulación sanguínea, mejora del estado de ánimo, mejora de la calidad del sueño, autoestima, alivia los dolores menstruales, dolores de cabeza, fortalece los músculos pélvicos, aumenta la inmunidad, regula los intestinos, previene ataques cardíacos, retrasa los efectos del envejecimiento, entre otros beneficios.
Pero las personas deben estar conscientes de situaciones que son perjudiciales para las relaciones sexuales, como: estrés, cansancio, depresión, prisas, baja autoestima, rutina. En los adolescentes también es muy común el miedo a decepcionar a su pareja y la idea de que está haciendo algo mal.
También debemos destacar que este pico de excitación no debe ser el único objetivo del sexo, ya que lo volvería mecánico, sería un momento más de exigencia para obtener el mejor rendimiento posible. Las relaciones sexuales deben sentirse en todos sus momentos; juegos previos, intercambio de caricias, química, entregarse el uno al otro. En realidad, el orgasmo es sólo la consecuencia de todos estos factores. La ansiedad es un factor extremadamente negativo, que dificulta el orgasmo, pudiendo incluso provocar eyaculación precoz e impotencia.